"Los marcianos llegaron ya (Witch Hitch)" es una caricatura de 1965, del segmento "La Tonta bruja", dentro de la serie "El Show del Inspector Ardilla", de Hanna-Barbera".
La bruja Winnie vuela alegremente en su escoba, cuando escucha en la radio que un objeto no identificado está volando sobre la casa blanca. Winnie vuela hacia el lugar, en donde el OVNI ha aterrizado y de el sale una criatura robusta, de piel verde y con cuatro brazos. La criatura saluda a los terrestres, identificándose como Ogg y haciendo saber que está ahí para conquistar el planeta. Comienza a decir que el armamento terrestre es inútil ante sus poderes, cuando, la tonta bruja se estrella contra el, provocando que caiga. La criatura se molesta y para demostrar su poder saca un rayo desintegrador de su casco y hace desaparecer a un tanque de guerra. Winnie lo felicita por su truco, pero, mediante un hechizo, hace que vuelva a aparecer el tanque, lo que molesta al extraterrestre, ya que lo hace quedar muy mal. Molesto con Winnie, decide usar su eliminador, sacando de su casco una antena que deja caer un gran peso sobre Winnie, aparentemente aplastándola, pero la bruja aparece detrás de el, sin ningún daño. Ogg dispara su rayo desintegrador sobre Winnie y esta desaparece, pero vuelve a aparecen de pequeño tamaño sobre la nariz del extraterrestre. Ogg la toma con sus dedos y la introduce en su casco, en donde Winnie ve una gran cantidad de máquinas, palancas y botones, y empieza a moverlos y presionarlos, provocando que el alienígena pierda el control y se estrelle contra el piso. Winnie aparece a su lado y Ogg le dice que destruirá la tierra, por lo que la bruja realiza un hechizo sobre el, convirtiéndolo en un cerdo verde. El extraterrestre corre a su nave, donde tiene un aparato contra brujerías, pero cuando lo prueba, este no funcione. Furioso por su fracaso en volver a la normalidad, toma la decisión de destruir el planeta, por lo que se comienza a elevar en su nave espacial, pero Winnie la hace desaparecer, provocando que el extraterrestre caiga y se estrelle, nuevamente, en el suelo. En el suelo, Ogg se comienza a lamentar su mala fortuna y a llorar, lo que enternece a Winnie, quien le dice que lo que debe hacer es conquistar su planeta, pero con amor, y lo vuelve a la normalidad y reaparece su nave. Ogg agradece a Winnie y regresa a su planeta para llenarlo de bondad y amor.
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